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Riaño, los fiordos leoneses

El embalse de Riaño y sus Fiordos se han constituido en uno de los símbolos del emergente Riaño que evocan imágenes de una época en donde la gente vivía de la agricultura en los extensos valles hoy anegados y rodeados de un entorno increíblemente empinado y rocoso.

Los Fiordos Leoneses son uno de los espacios naturales donde puedes combinar distintas actividades, tanto para quienes buscan la belleza, la tranquilidad y la calma, como para los que buscan liberar adrenalina a través de actividades de senderismo y acuáticas.

Las sensaciones de disfrutar de una navegación guiada durante la primavera y el verano son muy difererentes a las que descubrirás durante la navegación en el otoño y el invierno. En primavera y verano descubrirás un paisaje con una vegetación exhuberante, consecuencia del deshielo de las nieves que se asientan en el territorio durante los meses de invierno. La fauna y vegetación despiertan del letargo invernal y muestran una multitud de colores y de especies que conviven en un ecosistema único: el “Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre”.

En los meses de verano podrás disfrutar de una aventura acuática como es el jetboat que con sus picados y giros te harán sentir sensaciones únicas en un entorno incomparable e inmejorable. Piraguas y motos acuáticas amplian la posibilidad de diversión en los Fiordos Leoneses.

La primavera y el verano es el tiempo ideal para disfrutar de ascensiones míticas como al Pico Yordas o al Pico Gilbo en las inmediaciones de los Fiordos Leoneses. La senda de la mitología y la cueva de la vieja del monta son paseos para ser disfrutados por todos los públicos.

En el otoño disfrutaremos del sonido de la montaña con la berrea y una variedad cromática en sus bosques con la que naturaleza capta el interés del turista o visitante.

En invierno el paisaje desprende tranquilidad y calma mientras disfrutamos de rincones mágicos y únicos.